El hombre pudo más que el reglamento
Trasladó al hospital a un niño ahogado en una bañera; los agentes lo tienen prohibido
LA NACION
Un policía se vistió de héroe al salvar la vida un bebe de un año y medio que había caído en una bañera en un departamento de Balvanera. Se trata del subinspector Eduardo Walsh, que trabaja en la comisaría 7a., que para mantener con vida al pequeño debió practicarle tareas de reanimación cardiopulmonar y luego llevarlo en el patrullero, por decisión propia, hasta el hospital Ramos Mejía.
El dramático episodio tuvo lugar el 25 de marzo pasado, pero sólo ayer salió a la luz por la llamada de una vecina a los medios, con la intención de que se reconozca públicamente la acción del policía.
Aquel mediodía, mientras Walsh hacía su recorrido habitual por el barrio recibió una alerta del 911 por un caso de un menor ahogado.
"Una niñera estaba bañando a dos chicos cuando recibió una llamada telefónica. Al volver, Johnatan estaba boca abajo en la bañera", explicó el subinspector Walsh en diálogo con La Nacion. Y agregó: "La mujer lo había dado por muerto".
Según la descripción del policía, el bebe estaba "pálido, inconsciente y no se le sentía la respiración", por lo que le practicó tareas de reanimación hasta que el chico comenzó a escupir agua y a toser.
En ese momento, la niñera informó al policía que el pequeño Johnatan había sido operado del corazón hacía algo más de un mes y todavía estaba en etapa de recuperación. Walsh decidió llevarlo al hospital, pese a que, por reglamento, el policía no está autorizado a trasladar heridos.
"Apremiaba que lo atendiera un médico ?explicó Walsh, que hace 12 años integra la Policía Federal?. Usé mi criterio y asumí la responsabilidad de la situación."
El subinspector ?que es casado y tiene dos hijos? recibió el apoyo de sus superiores, quienes respaldaron su actuación. También el padre de Johnatan se acercó a la comisaría 7a. para agradecer y felicitar al policía que le salvó la vida a su hijo.
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